miércoles, 9 de marzo de 2011

¿Qué hacemos con nuestro miedo a la recaída?

 

Durante el tratamiento que el paciente va a llevar a cabo, nos enfrentaremos con momentos en los que
parece que todo se va a derrumbar. En ocasiones esta percepción, es fruto de conductas que observamos
en el paciente, y en otras, de nuestra permanente preocupación. Todos aceptamos que durante éste proceso, el paciente se enfrentará a momentos que se caracterizan por el posible deseo de consumo de droga. También es cierto que el deseo de consumo, forma hasta ahora parte de su historia, y por tanto escuchar de nuestro hijo/a que existen momento  como éstos, es lo mejor que nos podemos encontrar, si lo que queremos es ayudarle desde su realidad. Son situaciones como éstas cuando se dispara en nosotros toda una serie de pensamientos, que hacen emanar emociones que habitualmente describimos como miedo. En éste sentido, es conveniente reconocer ante el paciente nuestro miedo, y no intentar transmitirle una falsa sensación de tranquilidad y confianza. Es cierto que en ocasiones tememos por su proceso, y con éste
realismo debemos transmitirlo. Es recomendable no hacer nada contra éstemiedo, y por tanto dejar que en nosotros emanen emociones como ésta. El miedo, la preocupación, el deseo de tranquilizarnos totalmente ante el problema, vendrá después de algún tiempo de abstinencia por parte del paciente, y de esta forma entenderemos que no hay camino alguno que nos tranquilice rápidamente, sino es el de dar tiempo para ver lo que sucede en la "vida del paciente".
Si expresamos con sinceridad lo que sentimos, enseñaremos al paciente a relacionarse con nosotros desde la sinceridad, a través de la cual es capaz de reconocernos debilidades, dudas, tentaciones para consumir. Es el camino más útil para ayudarle. No incurrimos en ninguna falta con el paciente cuando tenemos miedo.
Estamos sintiendo lo esperado en un proceso como en el que estamos involucrados. El miedo desaparecerá con el tiempo y aceptar esta realidad nos hará más justos con el paciente y sobre todo con nosotros mismos.
Este miedo podemos compensarlo con nuestro apoyo al proceso de recuperación,con los logros conseguidos, evitando que ese miedo se convierta en desconfianza.
 
 
Ramón Roa
SECC:02 EES
Bibliografia: La familia en el tratamiento del drogodependiente "Blanca Molina Molina "

No hay comentarios:

Publicar un comentario